La estructuración financiera largo plazo debe tomarse con base en los indicadores de gasto en salud digital del público objetivo, tazas de crecimiento por región, indicadores financieros del banco mundial para observar muy de cerca los indicadores inflacionarios a nivel global y regional. De igual forma, evaluar la legislación nacional actual en materia de salud y su interacción con plataformas digitales, así como los riesgos de cambios regulatorios, con relación a los datos biométricos y posibles restricciones.
Por otro lado, considerar la elasticidad de la demanda y reevaluar su modelo de pricing, resulta relevante; ya que las fluctuaciones en el poder adquisitivo de los clientes pudiera afectar la utilidad bruta; por lo que abordar este problema desde un servicio que proporcione valor medio agregado en comparación a un beneficio completo a través del uso de los datos de salud del paciente… Pudiera resultar favorable.
Esto último, trae como resultado un KPI importante: Tasa de conversión a clientes recurrentes, ya que una de las variables a tomar en cuenta dentro del modelo Montecarlo será el CAC Y rango de posibles valores debido del cliente. Al incorporar estas variables como distribuciones probabilística, incrementa la capacidad de predicción de nuestro análisis de Montecarlo y así anticipar escenarios de riesgo financiero.
Finalmente, situadas las probabilidades no resultan en favor de la empresa de salud, la dirección puede optar por ser absorbida e integrada a las empresas dominantes en el mercado. Estas últimas son capaces de poder amortiguar las fluctuaciones económicas con mayor facilidad.