Coincido contigo que los problemas no aparecen de un día para otro. Efectivamente son resultado de un falla contínua en el pasado y que se mantiene en el presente. Lo ideal sería que la empresa haga las correcciones necesarias para mejorar el proceso o área que está fallando pero, el problema real es identificar esa falla. Es ahí cuando los KPIs toman relevencia, puesto que ellos nos pueden alertar cuando hay cambios o cuando algo ya no está funcionando.
Gracias por tu análisis, me ayudó a reflexionar más sobre este tema.
Gracias por tu análisis, me ayudó a reflexionar más sobre este tema.