Coincido totalmente contigo en que uno de los errores más comunes en empresas digitales es asumir que una estrategia que funcionó en el pasado seguirá siendo efectiva sin ningún tipo de revisión o ajuste. Tal como mencionas, el entorno del comercio electrónico cambia tan rápido que no adaptarse equivale a perder competitividad. También concuerdo en que un monitoreo continuo de KPIs transforma la gestión empresarial: deja de basarse en suposiciones o intuiciones y se convierte en una toma de decisiones informada, estratégica y enfocada en resultados reales. En definitiva, medir consistentemente y actuar sobre esos datos no solo permite reaccionar a tiempo, sino anticiparse y convertir esa información en una verdadera ventaja competitiva.